La Lectura De Tipo Literal /
Comprensión Localizada Del Texto
En
este tipo de lectura se explora la posibilidad de leer la superficie del texto,
entendido esto como la realización de una comprensión local de sus componentes:
el significado de un párrafo, de una oración, el significado de un término
dentro de una oración, la identificación de sujetos, eventos u objetos,
mencionados en el texto, el reconocimiento del significado de un gesto (en el
caso del lenguaje de la imagen) o el reconocimiento del significado y función
de signos como las comillas, o los signos de interrogación. Se considera como
una primera entrada al texto donde se privilegia la función denotativa del
lenguaje, que permite asignar a los diferentes términos y enunciados del texto
su
“significado
de diccionario” y su función dentro de la estructura de una oración o de un
párrafo. Este modo de lectura tiene que ver también con la posibilidad de
identificar relaciones entre los componentes de una oración o de un párrafo.
En
este modo de lectura se indagan, básicamente, tres aspectos básicos:
a) Identificación / Transcripción:
se refiere al reconocimiento de sujetos, eventos u objetos, mencionados en el
texto o el reconocimiento del significado literal de una palabra, una frase, un
gesto, un signo, etcétera, a manera de transcripción.
b) Paráfrasis:
entendida como la traducción o reelaboración del significado de una palabra o
frase empleando sinónimos o frases distintas sin que se altere el significado
literal.
c) Coherencia y cohesión local:
se refiere a la identificación y explicación de relaciones sintácticas y semánticas
entre los componentes de un párrafo o dentro de una oración.
La Lectura De Tipo Inferencial /Comprensión
Global Del Texto
En
este modo de lectura se explora la posibilidad de realizar inferencias,
entendidas como la capacidad de obtener información o establecer conclusiones
que no están dichas de manera explícita en el texto, al establecer diferentes
tipos de relaciones entre los significados de palabras, oraciones o párrafos.
Este
tipo de lectura supone una comprensión global de los significados del texto y
el reconocimiento de relaciones, funciones y nexos de (y entre) las partes del
texto: relaciones temporales, espaciales, causales, correferencias,
sustituciones etcétera, para llegar a conclusiones a partir de la información
del texto. Aspectos como la coherencia y la cohesión son centrales en este tipo
de lectura.
En
el proceso de inferir información también se ponen en juego los saberes con que
cuenta el lector, así como la posibilidad de identificar el tipo de texto:
texto narrativo, texto argumentativo, texto explicativo, etcétera, y la explicación
del funcionamiento del fenómeno lingüístico (la función lógica de un componente
del texto, la función comunicativa del texto en general, la forma como se
organiza la información en el texto…).
De
acuerdo con lo anterior, en este modo de lectura se exploran tres aspectos
básicos:
Enciclopedia:
se trata de la puesta en escena de los saberes previos del lector para la
realización de inferencias.
Coherencia global - progresión
temática: se refiere a la identificación de la temática global
del texto (macroestructura) y al seguimiento de un eje temático a lo largo de la
totalidad del texto.
Coherencia global - cohesión:
se refiere a la identificación y explicación de relaciones de coherencia y
cohesión entre los componentes del texto para realizar inferencias.
La Lectura Crítico-Intertextual /
Lectura Global Del Texto
Este
tipo de lectura explora la posibilidad del lector de tomar distancia del
contenido del texto y asumir una posición al respecto. Supone por tanto, la elaboración
de un punto de vista. Para realizar una lectura crítica es necesario
identificar las intenciones de los textos, los autores o las voces presentes en
estos. También es necesario reconocer características del contexto que están
implícitas en el contenido del mismo. Por otra parte, en este modo de lectura
se indaga por la posibilidad del lector de establecer relaciones entre el
contenido de un texto y el de otros. Este tipo de lectura explora los siguientes
tres aspectos básicos:
Toma de posición:
tiene que ver con asumir por parte del lector, un punto de vista sobre el
contenido total o parcial del texto.
Contexto e intertexto:
se refiere a la posibilidad de reconstruir e identificar el contexto
comunicativo e histórico de aparición del texto, y la posibilidad de establecer
relaciones con otros textos en cuanto a su forma y su contenido.
Intencionalidad y superestructura:
se trata de explorar el reconocimiento de las intenciones comunicativas que
subyacen a los textos así como el reconocimiento del tipo de texto en respuesta
a la intención de comunicación.